viernes, 3 de marzo de 2017

MATRIMONIOS - APRENDIENDO A MORIR

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MATRIMONIOS
Por: Camilo Sastoque
Ministerio Unidad de la Fe

APRENDIENDO A MORIR

Mat 16:24 Entonces Jesús dijo a sus discípulos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, y tome su cruz, y sígame.

INTRODUCCIÓN

Todo verdadero discípulo de Cristo está en proceso de morir a sí mismo, aunque no lo sepa o lo entienda. Y el matrimonio es la oportunidad de lograrlo más certera que tiene Dios para trabajar en nosotros.

Amar a nuestro cónyuge no es fácil y menos cuando las cosas no van bien. Amar es fácil y sencillo cuando las cosas van bien, cuando todo sale a pedir de boca, allí no hay problemas, ni peleas. El amor fluye sin necesidad de trabajar en él, pero cuando las cosas no van bien, cuando hay problemas, la economía no fluye, la desesperación, la frustración y la incomodidad surgen entonces se prueba que tanto se ama conforme al amor de Dios y que tanto hemos dejado de amarnos a nosotros mismos para darnos a nuestro cónyuge.

DESARROLLO

Negarse a sí mismo es dejarse a un lado para tomar con mayor importancia al prójimo, y nuestro prójimo más cercano es nuestro propio cónyuge. Negarse implica dejar de ser, para que el otro sea, abandonar todo egoísmo y todo rasgo de nuestra naturaleza carnal, esa que guiaba nuestras acciones.

Negarse implica morir, y amar trata con lo más íntimo de nuestro ser, nadie quiere morir, nos rehusamos a morir y eso genera conflicto en el matrimonio, si uno de los cónyuges no está dispuesto a morir por su pareja, le costara sufrirla, entregarse, consagrarse y amarla de verdad.

Estas dispuesto a morir a ti mismo y amar a tu prójimo como a ti mismo?, pruébalo, y la mejor forma de hacerlo es en el matrimonio, un cónyuge que no muere a si mismo sencillamente no permite que el amor fluya. El matrimonio es una entrega incondicional por otro ser que aunque se dice que se ama, en realidad esa prueba aún no ha sido ensayada. Morir a uno mismo es el proceso que se experimenta en el matrimonio cuando Dios dice que debemos ser uno, antes éramos dos separados, ahora somos uno y debemos dejar de ser para que la unidad se consuma.

CONCLUSIÓN

En realidad quieres experimentar lo que es amar?, cásate, soporta a tu cónyuge, súfrelo, confórtalo, ayúdalo, conócelo, entiéndelo, entrégalo todo y si después de eso puedes seguir adelante, entonces aprenderás lo que es amar.

¿Te parece fácil el desafío?, 1 de cada 3 parejas se separa en el primer año, 2 de cada 3 se separa luego de 5 o 10 años, las estadísticas están en nuestra contra, pero ese es el amor que Dios demanda al hombre, un amor en donde el morir a si mismo está implícito, y en el cual no pueden permanecer 2 personas, sino solo una.

Amar a nuestro cónyuge es uno de los más altos privilegios del reino de Dios, no será fácil, pero será parte del camino para que Dios obre en nuestros corazones y nos perfeccione. Por eso ama mientras aprendes a morir.

Señor enséñanos a morir para amar a nuestro cónyuge como tu amas a tu iglesia, que podamos ser fieles testigos de tu bondad y amor, y mostrar a nuestro cónyuge cuanto hemos muerto a nosotros mismos en servicio y amor, amen.


2 comentarios:

  1. wwwwoooowwww!!! que impactante y muy cierto .... y creo es ahi donde Dios se da cuenta si verdaderamente queremos morir al yo y mas si tenemos marido de dificil caracter o esposas... bueno es mi humilde opinion

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